El CD Tahíche: Un campeón con fe
El equipo dirigido por Careca la dio la vuelta al resultado desfavorable conseguido en Tahíche (2-4)
El fútbol nos ha vuelto a demostrar que en esto del balompié casi todo es posible. En la noche de ayer podemos dar fe de ello porque se culminó y selló de una manera poco esperada, la eliminatoria final de la Liga Regional que venía ya condicionada de manera notable. Se trataba, como saben, de una final a doble partido donde el Playa Honda llegaba con muchas más opciones tras conseguir un 0-2 en Tahíche que a priori parecía definitivo.
Pero este viernes se volvió a vivir una noche loca de fútbol en la que ocurre todo lo contrario a lo que la mente puede concretar en el preciso momento que menos esperas.
Arrancó el envite con mucha afluencia de público en las gradas, seguidores en su mayoría del Playa Honda, en una cita que se esperaba con ganas para todos los amantes de este deporte. El Playa Honda tuvo todo en su mano para conseguir el campeonato pero el CD Tahíche no perdió la fe cuando más feas se pusieron las cosas, y consiguió algo en lo que muy pocos creían, posiblemente ni sus jugadores.
Ya no sólo por el resultado de ida, sino porque en los primeros compases del partido, el Juventud apretó arriba y fue superior a su oponente. Los de Granados cerraron bien las líneas de pase y robaban en posiciones adelantadas. De esta manera, durante los primeros 15 minutos, desconectaron del partido a Ubay y Gaume, que no conseguían entrar en juego de manera constante.
Además, Echedey se encargó de poner las cosas más difíciles para los de Careca con un tanto de bandera en el que tras un sensacional autopase y el recorte al portero, ponía en el 1-0 en el electrónico. En ese punto, los jugadores del Tahíche miraban al suelo buscando la fuerza para anotar lo antes posible y poder meterse en el partido. Y entonces en menos de media hora se obró el milagro.
A base de balones parados, mal defendidos por parte de los de Granados, el Tahíche volteó el resultado. Se puso 1-3 antes del descanso con un Ubai descomunal que se le veía imparable con la testa en los balones aéreos, por cierto, muy bien ejecutados por ambas bandas.
El descanso sirvió para reajustar ciertos aspectos del juego y los dos equipos lucharon en el segundo acto cada cual en favor de sus intereses. El Juventud lo intentó con la velocidad de Rayco y la calidad de Echedey mientras que el Tahíche se resguardaba atrás e intimidaba arriba con la presencia de Ubay (jugó todo el partido en punta).
Los compases finales sirvieron para ver el cuarto del Tahíche y el segundo del Playa Honda que serían ya estériles. Se cerró así el partido con la correspondiente celebración del CD Tahíche sobre el terreno de juego. El Playa Honda se retiró al túnel de vestuario con el aplauso de sus aficionados. Una hinchada ,que por cierto, mostró su descontento con el trío arbitral en la salida del campo.
Se cierra una competición insular con un campeón que ha tenido fe hasta el final y que se merece luchar por esa plaza en Preferente.