El sucesor de Alejandro Hernández
Marcos Bermúdez quiere seguir los pasos del árbitro internacional
No está pasando por buenos momentos el gremio arbitral en estos momentos, una pequeña parte de la sociedad y muchos medios de comunicación se han encargado de dejarles como los malos de la película sin tener en cuenta que han sido, son y serán fundamentales en el deporte rey, el fútbol. En el 2016 en la gala de Radio Marca Lanzarote se daba el premio de Mejor Deportista del Año al árbitro lanzaroteño Alejandro Hernández por su inmaculada trayectoria (llegando a convertirse en el mejor árbitro de España) pero también para que los árbitros fuesen reconocidos como lo que realmente son, deportistas.
Gracias al gran trabajo que está haciendo Alejandro Hernández muchos han decidido probar en este complejo mundillo del arbitraje. Un ejemplo de ello es el de Marcos Bermúdez, un niño de 12 años que acaba de terminar el curso de iniciación al arbitraje y que ya está ejerciendo de juez en encuentros de categoría benjamín y alevín. Marcos contó su historia en los micrófonos de Radio Marca Lanzarote.
El joven árbitro comentó que empezó a jugar en un equipo pero rápidamente se dio cuenta que no era lo que quería por lo que decidió dejarlo. Tras ver a Alejandro Hernández y conocer su historia empezó a investigar de cómo podría llegar a ser árbitro de fútbol que era lo que realmente le llamaba la atención en este deporte.
Marcos se informó y se apuntó en el curso de iniciación al arbitraje impartido por la Delegación Insular de Árbitros, en el que Hernández Hernández es unos de los docentes. Finalizó el curso con muy buenas notas y ya ha tenido la oportunidad de arbitrar sus primeros encuentros. En unas jornadas en las que lleno de ilusión en las noches anteriores “ha dormido muy poco”. Tiene claro que para llegar hasta donde está su profesor “tiene que trabajar mucho” pero con “ganas, esfuerzo e ilusión” se `pueden conseguir todo lo que se proponga.