El gran capitán devuelve la sonrisa a la UD Lanzarote

La magia de Miguel Gómez en el minuto 90, permite a Rosmen hacer el tanto de la victoria (1-0) 

Llegaba el conjunto de Josu Uribe con urgencias al partido, tras las dos derrotas frente a la UD San Fernando y el Arucas CF y el empate del pasado domingo ante la UD Gran Tarajal, que además no dejó un buen poso en el seno del conjunto rojillo.

Una vez más, y está en el monto más importante, los aficionados no pudieron acompañar a su equipo que se la estaba jugando, y el choque se disputó sin publico gracias a la decisión del Cabildo de Lanzarote.

Mal partido, muy disputado  en el centro del campo con pocas llegadas al área y con más tensión que fútbol. Empezó mejor el Panadería Pulido con una buena presión que le permitía robar en campo contrario y estar cerca de la zona de peligro pero sin generar oportunidades claras. Los minutos transcurrían entre bostezos pero los rojillos no pasaban apuros, la intensidad grancanaria iba disminuyendo y con el empate a cero se llego al descanso.

Salió mejor la UD Lanzarote en la segunda parte aunque se mantuvo el mismo guión, mucho centrocampismo, constante lucha por hacerse con el balón, muy poco fútbol y el peligro en jugadas a balón parado.

Lo mejor llegó al final, con el tiempo cumplido apareció la brillantez del jugador diferente, de ese que marca las diferencias, ese que como se dice hace que pagues la entrada, Miguel Gómez en el minuto 90 recogió una pelota en banda izquierda se giró y sacó un centro medido a la cabeza de Guti que tocó la pelota y Rosmen, incombustible, la cazó en boca de gol para meterla dentro de la portería. Era el 1-0 con el que los rojillos conseguían una victoria que les da tres puntos de oro para escapar de la zona peligrosa.

La UD Lanzarote se sitúa en la sexta posición en la tabla y deja la zona de descenso a tres puntos a falta de dos partidos por jugar en esta primera fase de la competición.