Paso atrás en Castellón
La UD Las Palmas pierde su primer partido a domicilio de la temporada y evidencia falta de claridad ofensiva (1-0)
La UD Las Palmas sufrió un serio tropiezo en su visita a Castalia, donde encadenó su primera derrota de la temporada lejos del Estadio de Gran Canaria en un encuentro en el que nunca logró sentirse cómoda. El conjunto amarillo, habitualmente dominante a través de la posesión y el control territorial, se vio superado por un Castellón más intenso, más directo y con las ideas más claras a la hora de atacar los espacios. La falta de brillantez ofensiva, unida a múltiples imprecisiones en la circulación del balón, provocó que el equipo de Luis García pasara más tiempo defendiendo que proponiendo.
El técnico introdujo un único cambio respecto a la victoria ante el Albacete: Marvin Park ocupó el lateral derecho y Viti Rozada adelantó su posición para actuar como extremo. Sobre el papel, la propuesta buscaba velocidad y profundidad, pero Las Palmas nunca consiguió activar ese plan. El Castellón, muy agresivo en la presión, obligó a los amarillos a refugiarse en conducciones forzadas, balones divididos y acciones sin continuidad. Aun así, el gran protagonista de la primera mitad fue Dinko Horkaš, quien sostuvo al conjunto grancanario con varias intervenciones determinantes.
El portero croata respondió con firmeza a un remate claro de Awer Mabil tras un rechace dentro del área y volvió a aparecer minutos después ante un disparo a bocajarro de Beñat Gerenabarrena. También Mika Mármol evitó un remate cantado de Camara, en una fase donde Las Palmas achicaba agua sin poder dar dos pases seguidos. El descanso llegó como un alivio para un equipo que, pese a no atacar con peligro, había logrado mantener el marcador en tablas.
La reanudación ofreció una tímida mejoría. Viti Rozada dispuso de una ocasión prometedora dentro del área, aunque su disparo se marchó por encima del larguero. No obstante, el Castellón reaccionó con rapidez y volvió a inquietar tras una pérdida de Enzo Loiodice que habilitó un contraataque peligroso. Con el paso de los minutos, el encuentro se enfrió y se convirtió en un intercambio de posesiones sin profundidad, favoreciendo al conjunto local, más cómodo en un ritmo bajo y en duelos individuales.
Luis García movió el banquillo: entró Iván Gil por Pejiño, y más tarde Jonathan Viera y Jesé Rodríguez para buscar claridad y último pase. Sin embargo, el gol del Castellón llegó en el momento de mayor incertidumbre para Las Palmas. Brian Cipenga desequilibró en banda y sirvió un balón preciso al área para que Israel Suero definiera con un disparo inapelable. El tanto dejó tocado al representativo, que no halló vías para reaccionar.
En los instantes finales, la UD intentó un arreón a la desesperada, pero sin generar ocasiones reales de peligro. La falta de ideas, de precisión y de frescura en los metros finales acabó condenando al equipo, que se marchó de Castellón con la sensación de haber firmado uno de sus partidos más flojos en lo que va de curso y con la necesidad de corregir errores antes de que el bache vaya a más.