Esta vez Sergio Ramos no pudo culpar a Hernández Hernández
El capitán del Real Madrid en lugar de asumir el descenso natural en su juego busca constantemente cortinas de humo para protegerse
Una vez más se fue a la caseta antes de tiempo. Con la de ayer, Sergio Ramos suma un total de 26 expulsiones como profesional convirtiéndose en el futbolista más expulsado de la Liga- superando a férreos zagueros como Pablo Alfaro o Xavi Aguado-, de la Champions, de la selección española y por supuesto, del Real Madrid CF.
Tras la penúltima derrota del Madrid, en este caso en el campeonato doméstico ante el Levante CF, el capitán del club blanco arremetió contra Alejandro Hernández Hernández por su actuación, dando a entender que el lanzaroteño tiene algún tipo de afronta personal con él. Algo absolutamente falso.
Y hay que decirlo. Ramos se ha equivocado y mucho. Especialmente por ser el emisor de ese mensaje. El capitán del Real Madrid y de la selección española porta el brazalete no sólo para salir guapo en las fotos y para grabar documentales sino también para ejemplificar fuera del verde. Una metedura de pata de estas características sería perdonable a un joven debutante que, ante un error, quisiera cubrirse las espaldas; a Sergio Ramos no.
Porque además entra otro factor en juego. La incapacidad de defensa que tiene en este caso Alejandro Hernández que, por su profesión, no puede opinar y pronunciarse al respecto; todo ello le confiere al asunto un punto maligno impropio de uno de los mejores centrales de la historia reciente el balompié.
El "4" debería disculparse públicamente pero como no lo hará, mínimamente tendría que realizar un ejercicio de humildad ya que como a todos le llega el final. Está prolongando su ocaso, no desde la elegancia del que lo ha ganado todo sino desde la cobardía del recién aterrizado en la élite. Cortinas de humo.
