La FCB “arremete” contra Lorenzo Lemaur
El ente federativo emitió un duro comunicado para defenderse de los ataques infundados del Lorenzo Lemaur
Lemaur vuelve a ser protagonista con un nuevo “caso”, esta vez con la Federación Canaria de Balonmano.
La Federación Canaria de Balonmano, ante la publicación en redes sociales de un escrito lleno de falsedades y con la clara intención de desprestigiar al presidente de esta Federación, iniciada por el “autoproclamado” cronista, informador e historiador, D. Lorenzo Lemaur Santana, ex presidente de la Federación Canaria de Balonmano y Medalla de Oro de la misma, quiere expresar lo siguiente:
Elecciones
El proceso electoral se ha realizado siguiendo la normativa y reglamentos que están vigentes, y emanan de la Dirección General de Deportes del Gobierno de Canarias. Toda la documentación ha estado a disposición, desde el pasado 19 de enero y hasta el 15 de marzo, en la web y redes sociales de la Federación, así como la convocatoria se publicó en dos medios de comunicación (Canarias 7 y El Día) tal y como contempla la normativa y se publicó en los tablones de anuncio de las distintas Federaciones Insulares.
En las Federaciones Insulares y Federación Canaria se presentaron candidaturas a todos los estamentos: clubes, deportistas, entrenadores y árbitros; se celebraron votaciones en todas las islas a aquellos estamentos donde hubo más candidatos que puestos a cubrir.
Los representantes, libre y democráticamente elegidos, son los encargados de avalar a los candidatos que se presenten a la Presidencia en todas las federaciones. En el caso específico que le preocupa al Sr. Lemaur, la Federación Canaria, los 30 asambleístas que la componen, avalaron la candidatura de D. Blas Parrilla Cabrera, y lo hicieron de forma libre y sin presión, y no como pretende insinuar a través de una supuesta campaña de coacción por parte del candidato, quien tras su reelección ha iniciado su sexto mandato y no el séptimo como el Sr. Lemaur pretende “desinformar”. Como dice el dicho: “Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo.”
Formación
La prueba evidente de que solo pretende enmerdar y difamar, es afirmar categóricamente que no hay actividades ni formación. Por resumir su osadía, le decimos que en los tres últimos años hemos realizado un curso de monitor de Balonmano Playa, el primero online en todo el territorio nacional, dos cursos de balonmano nivel I (monitor), dos cursos de balonmano nivel II (Territorial), dos cursos de árbitros, cursos de pretemporada de árbitros, las jornadas “Hablemos de balonmano”… Gracias a la formación impartida, contamos con 17 nuevos técnicos nivel III (entrenadores nacionales).
Actividades
Hemos realizados concentraciones de tecnificación individual en categoría infantil, así como eventos de Balonmano Playa, Torneo Internacional de España del 2019 y 2021 y no solo el del 2019 como vuelve a “desinformar”, y el Campeonato Europeo de Clubes de Balonmano Playa 2017. Detrás de la organización de estos eventos hay mucho trabajo por parte de las Federaciones Insulares y de la Federación Canaria de Balonmano, así como de los clubes y personas a título individual que han colaborado en la celebración de todas y cada una de estas actividades, lo cual aprovechamos para agradecer el trabajo y la predisposición a sumar para la mejora del balonmano canario, esa que el Sr. Lemaur está empeñado en ocultar. De ahí qué en Canarias, en estas tres últimas temporadas y a pesar de la pandemia COVID-19, se han celebrado sectores nacionales de categoría cadete (Morro Jable), juvenil (Rocasa), fase de ascenso a División de Honor Plata de categoría femenina (Rocasa), fase final de ascenso Plata Masculina Lanzarote (San José) y Final Copa de la Reina (Rocasa), entre otros.
Además invertimos en salud y realizamos más de 3500 test de antígenos para preservar la salud de nuestros jóvenes deportistas
Selecciones
En relación a las selecciones, es obvio que su frustración le impide ver todo el trabajo que se realiza, donde los seleccionadores nombrados, aunque se empeñe en decir que no se conocen, están incluidos en todas y cada una de las convocatorias oficiales que se pueden ver en la web de la federación. Aparecen sus nombres y apellidos, y son conocidos por los clubes. De hecho, son entrenadores activos del balonmano, y hacen un trabajo impecable desplazandose por las islas para realizar entrenamientos cada fin de semana. Sin duda, un trabajo altruista que es cuestionado por el Sr. Lemaur porque parece que desconoce el significado de la palabra “altruista”. Lo que está claro, y no nos extraña, es que no los conoce como no conoce, y así lo demuestra en este escrito, la realidad del balonmano canario actual pues hace mucho tiempo que no se le ve por las distintas canchas.
Desprecio a los estamentos del balonmano
En relación con su insinuación, falta de respeto y desprecio permanente hacia el trabajo diario de todas las personas que se relacionan con el Balonmano y las distintas federaciones, le anunciamos que nos encontrará enfrente, en contra de sus descalificaciones, como no puede ser de otra manera, y por mucho que se esfuerce en restar méritos a los logros conseguidos por los clubes, jugadores, entrenadores y árbitros, lejos de restarnos fuerzas, seguiremos trabajando, a pesar de sus bochornosas y sonrojantes “desinformaciones”.
Machismo visceral
Si tuviera un mínimo de dignidad, se ahorraría comentarios como el que hace relacionado con el presidente y, sobre todo, con Dña. Carmen de la Rosa, a la que su machismo visceral solo le permite nombrarla como la mujer (que lo es) del presidente, cuando es una pionera en el mundo del balonmano. Para refrescar su espesa memoria, le recordamos que fue de las primeras mujeres árbitro del balonmano español, llegando a arbitrar en División de Honor (haciendo pareja con el grancanario De Castro) y que ha desempeñado numerosas labores en distintos momentos en el balonmano nacional (designador, delegada federativa o en la actualidad Delegada de Mesa, entre otros), canario (vicepresidente, presidenta del Comité de Actividades y secretaria) e insular (vicepresidenta, presidenta del Comité de Actividades, y en la última legislatura presidenta de la misma).
Además ha sido reconocida con la Medalla de Plata por la RFEBM por su trabajo y no por ser la “mujer” del presidente como usted tan malignamente vende. Tiene capacidad más que probada, aunque puede que algunos, por su condición de hombre, no lo admitan. Por suerte, tanto ella como el presidente tienen trabajo, por lo que sólo se podrán jubilar en el mismo y no, como el Sr. Lemaur sugiere, por la Federación.
En otro orden de cosas, estamos convencidos de que ningún presidente de club hablaría como insinúa. Pueden no estar de acuerdo con la gestión del presidente, lo cual es lícito y democrático, pero dudamos mucho de las descalificaciones personales que menciona y trata de vender. En cualquier caso, el ir a votar o no, es un acto de responsabilidad y cada uno lo ejerce libremente y no puede ser obligado.
Para finalizar, decir que esta Federación no va a entrar en el juego de dimes y diretes como pretende el Sr. Lemaur. Seguiremos en nuestros propósitos de mejora del balonmano canario, y con la misma ilusión y ganas que hemos tenido hasta ahora; seguiremos trabajando en la legislatura 2022-2026 mal que le pese.
Sinceramente, Sr. Lemaur, leyendo su escrito lleno de “desinformaciones” lo único que consigue es dañar al Balonmano Canario, y de verdad, qué da pena que quien intente dañar nuestro deporte sea un expresidente, lo que dice mucho de su persona y de sus pretensiones.
P.D.: El Sr. Lemaur fue reconocido por el actual presidente con la Medalla de Oro de la Federación Canaria por su trabajo en el balonmano, sobre todo en la década de los ochenta. Además, fue elegido presidente de la Federación Canaria de Balonmano por dos veces, aunque en ninguna acabó el mandato. Siempre se le respetará por lo que fue en el balonmano, pero nunca compartiremos en lo que se ha convertido y en lo que quiere convertir al balonmano canario al no querer reconocer que muy poca gente cree ya en él.
